EL CHEF ROBERT IRVINE SE ENFRENTA A RETOS CULINARIOS EXTREMOS EN EL ESTRENO DE 'CENA IMPOSIBLE', EN DKISS

EL LUNES 15 DE ABRIL A LAS 22:00

 

El experimentado cocinero buscará cada semana una nueva misión por la cual tendrá que preparar una deliciosa comida para una gran cantidad de comensales y con recursos muy limitados.

 

Abril de 2024.- En el día a día, todo el mundo afronta pequeños retos culinarios en su propia cocina: pensar en qué comer cada día, prepararse una buena cena con los pocos restos que quedan en la nevera, alimentarse de forma saludable y variada… Sin embargo, nada comparable a las aventuras a las que se enfrenta el chef de clase mundial Robert Irvine, presentador también de Restaurante imposible, en el nuevo programa de DKISS, Cena imposible, que se estrena el lunes 15 de abril a las 22:00.

En él, el cocinero recorrerá Estados Unidos en busca de los desafíos culinarios más extraordinarios que lo pondrán a prueba tanto física como mentalmente. Él y su equipo deberán trabajar en las situaciones más extremas, para una clientela muy numerosa y con el acceso a los recursos muy restringido, todo ello en una carrera contrarreloj, buscando siempre la excelencia en las elaboraciones. A lo largo de seis episodios de una hora de duración, Irvine hará de la cocina una emocionante aventura.

De un festín vikingo a un estadio de baseball

Algunos de los obstáculos que debe superar están relacionados con la temática del episodio. En uno de ellos, 50 leñadores son los comensales de una cena que tiene que preparar en un bosque donde se ha instalado una cocina con hornos de leña. Para conseguirla, solamente le ofrecen un hacha y muchos árboles. También es físico el reto que le proponen en California, donde, para conseguir ingredientes, deberá superar una serie de pruebas físicas basadas en la época de los vikingos.

En otras ocasiones, el gran desafío es el limitado espacio en el que trabajan. En un concurso de food tracks, el objetivo del chef y su equipo es conseguir el primer premio alimentando a 500 personas, con presupuesto de apenas 1.500 dólares y cocinando en los fuegos de la pequeña furgoneta. Mucho más grande es el estadio del equipo de baseball de Albuquerque, en el que 650 de sus trabajadores esperan los deliciosos platos de Irvine. Pero no todo será tan sencillo: el cocinero y su equipo deberán diseñar un menú de alta cocina inspirado en la comida Tex-Mex utilizando solamente los ingredientes que pueda encontrar a lo largo del estadio.      

“¿Puedo conseguirlo?”

Ante retos tan colosales, el propio Irvine ha admitido dudar de sus propias capacidades: “En cada misión de Cena imposible pensaba: ‘¿He llegado a mi límite? ¿Puedo conseguirlo?’”. Por último, el chef ha resaltado el espíritu de superación que transmiten los desafíos: “Estoy agradecido de poder hacer programas que impacten en el espectador de forma tan personal”.